Desde que lo oi por primera vez me gustó. Es un plato que recomiendo para hacer rock, no es adecuado o quizá lo sea menos para tocar otros estilos menos "ruidosos". Al principio es raro hacerse con su sonido, predominando sobre todo la larga cola que deja. Pero después de la primera reacción el plato se comporta de maravilla. Elegí la versión Power Crash por dos motivos: volumen y dureza del plato, ya que soy rompedor de platos. Creo que tiene el grosor adecuado para durar. Por lo que, baterías de rock, este plato es una delicia, y es super recomendable desde el primer momento, aunque sea caro.